Cocina de Mercado
Materia Prima «Kilómetro Cero»
EL «Por qué» de nuestra existencia.
«Desde que mi padres, Julio y Mariespe – de los cuales lo aprendí todo – hicieron del Restaurante Nino lo que ahora es, me di cuenta que lo más importante de todo era los productos utilizados en la elaboración de nuestros platos. Mi padre compraba magistralmente en los mercados cercanos, a proveedores directos, incluso «delicatessen» a los que solo tenía acceso Él. Sin duda, la mano de mi Madre, en esa cocina tradicional llena de Guisos, y de platos de una sencillez complejísima de reproducir, mezclaba y cocinaba de una manera que solo sabe hacer Ella, la magia se hacía, y se sigue haciendo. He tenido los mejores maestros que se pueden tener en este humilde negocio que es la Gastronomía, mi Padre y mi Madre. De ellos he aprendido que la magia empieza desde que selecciono hasta el último champiñón que sirvo en mis platos. Es fundamental, esencial…si esta dedicación, sin este cuiadado, el Restaurante Nino, no sería lo que ahora es.»
Alberto Romero Sáez. Chef y Propietario del Restaurante Nino.
Los Mejores Ingredientes
La elección de cada uno de los ingredientes es esencial, por ejemplo, nuestros Champis son elegidos manualmente para asegurarnos que no hay nada que pueda disturbar la experiencia que supone degustar nuestro plato estrella. Es esencial que todo este controlado y trazado de principio a fin. Cuando alguno de nuestros camareros ponga alguno de nuestros platos en tu mesa, solo piensa que es un completo ejercicio de cuidado y mimo, de absoluta entrega a la excelencia de nuestra propuesta.
Cocina Tradicional
Nos gusta «lo de siempre», sin artificios. Nuestra cocina huele a «casa»…a tradicional. nuestra propuesta se basa en esa «compleja sencillez» de la cocina de siempre que la convierte en algo maravilloso y que no debemos perder. Cuando entres en nuestra casa te sentirás como en la tuya, y queremos que te lleves de nuestra experiencia unos sabores clásicos y bien elaborados.
Nuestra elaboración sigue un orden perfecto para que la apuesta sea segura, para que nunca haya nada que no deba ser o estar. Esta experiencia, la experiencia del Restaurante Nino, nos pondrá en tu cabeza y en tu paladar como un sitio al que volver siempre que puedas.
